Las artes marciales como el Karate, el Kung Fu, o el Taekwondo, es una de las actividades que más puede contribuir en el proceso formativo de los niños, pues desarrolla tanto su estado físico como emocional favoreciendo considerablemente su rendimiento escolar y su relación con los demás. Es recomendable que sea a partir de los 3 o 4 años de edad cuando un niño o niña empiece a asistir a estas sesiones extracurriculares. La introducción del artes marcial a esta edad es un trabajo de recreación en el que se pretende que el niño tome contacto con la actividad mediante el juego y actividades lúdicas y recreativas. El principal objetivo es que el niño lo pase bien en un ambiente divertido y que le atraiga a volver.
¿Qué debo tener en cuenta para inscribir a mi hij@ en un centro de artes marciales?
Antes de inscribirse en un curso de artes marciales para niños en la temprana edad, lo más importante que se debe considerar es el nivel de especialidad del curso ofrecido. Es decir, ¿las sesiones se especializan en niños y niñas de ese nivel de edad en particular, o es una sesión que abarca todas las edades? Es importante la especialidad, porque los niños tienen diferentes necesidades y comportamientos dependiendo de la etapa de su vida en que se encuentren.
Lo segundo que se debe considerar es la vestimenta. La vestimenta comúnmente utilizada en la práctica de las artes marciales, y que en el caso de American Taekwondo System es de carácter obligatorio su uso, es el traje blanco llamado Dobok en coreano, y un cinturón blanco para aquellos que inician su trayectoria en las artes marciales.
También se utilizan otros implementos dependiendo del arte marcial, siendo los más comunes aquellas que se necesitan para la práctica del combate: protectores para la cabeza (casco), protectores para el área genital (o coca) disponibles para damas y varones, protector de torso (o peto) y los protectores de las extremidades para cubrir los antebrazos, muñeca, nudillos, canilla y empeine.
Dentro de nuestro programa en American Taekwondo Center manejamos también las armas orientales, en donde los usuarios obtienen beneficios como el equilibrio, la concentración y la coordinación a través del manejo de complejas herramientas milenarias como son los chacos o nunchucks, los chacos dobles o double nunchucks, el palo largo o bo, entre otras.
Estructura básica de una clase de Artes Marciales
Las clases de artes marciales suelen ser de treinta minutos a una hora, dependiendo de la edad del niño. De forma general, las clases son organizadas de la siguiente forma:
1. Es importante que la clase comience con una corta sesión de calentamiento seguida del estiramiento del cuerpo completo. En muchos casos, como en nuestras clases del grupo Seniors, se da inicio a la sesión mediante unos minutos de meditación para poder centrar la mente en la clase.
2. Trabajo técnico. Es la parte donde el niño/a toma por primera vez contacto con ejercicios técnicos orientados a aprender las patadas y movimientos instroductrios básicos del arte marcial.
3. Trabajo físico. En esta etapa se desarrollan todas las aptitudes físicas del niño mediante actividades lúdicas y de acondicionamiento físico para mejorar su estabilidad, motricidad, coordinación y flexibilidad. Por lo general incorporan las técnicas y movimientos básicos de las artes marciales.
4. Conclusión. Los últimos minutos de una sesión se debe dedicar a darle una charla motivacional y/o sobre los valores de las artes marciales. En el caso de American Taekwondo System, nuestro valores fundamentales giran en torno a la Confianza, Disciplina, el Respeto y el Control.
Adaptado de : Guía Infantil